sábado, 14 de enero de 2012

XI

-Yo soy ardiente, yo soy morena
yo soy el símbolo de la pasión;
de ansia de goces mi alma está llena.
¿A mí me buscas? -No es a ti; no.
...
-Mi frente es pálida, mis trenzas de oro;
puedo brindarte dichas sin fin.
Yo de ternura guardo un tesoro.
¿A mí me llamas? -No; no es a ti.
...
-Yo soy un sueño, un imposible,
vano fantasma de niebla y luz;
soy incorpórea, soy intangible;
no puedo amarte. -¡Oh, ven; ven tú!

domingo, 8 de enero de 2012

Definición.

Vida. (Del lat. vita) Fem.  
               La vida es una frase que aún me queda por hacer.




viernes, 6 de enero de 2012

Pero que me quedes tú.

Que se arruinen los canales de noticias,
Con lo mucho que odio la televisión.
Que se vuelvan anticuadas las sonrisas,
Que se extingan todas las puestas de sol.
Que se supriman las doctrinas y deberes,
que se terminen las películas de acción.
Que se destruyan en el mundo los placeres,
y que se escriba hoy una última canción.

Pero que me quedes tú, me quede tu abrazo,
y el beso que inventas cada día,
y que me quede aquí, después del ocaso,
para siempre tu melancolía.
Porque yo, yo si, si que dependo de ti,
Si me quedas tú, me queda la vida.

Que desaparezcan todos los vecinos,
que se coman las sobras de mi inocencia.
Que se vayan uno a uno los amigos,
y que acribillen mi pedazo de conciencia.
Que se consuman las palabras en los labios,
Que contaminen todo el agua del planeta.
O que renuncien los filántropos y sabios,
Y que se muera hoy hasta el último poeta.

lunes, 2 de enero de 2012

F. Moccia

Cuando una historia termina, el dolor, normalmente es proporcional a la belleza del amor vivido. Y entonces, llegan puntuales a traición los recuerdos.

Dicen que

a lo largo de nuestra vida tenemos dos grandes amores; uno con el que te casas o vives para siempre, puede que el padre o la madre de tus hijos, esa persona con la que consigues la compenetración máxima para estar el resto de tu vida junto a ella. Y dicen que hay un segundo amor, una persona que perderás siempre; alguien con quien naciste conectado, tan conectado que las fuerzas incluso escapan de la razón y os impedirán, siempre, alcanzar un final feliz. Hasta que cierto día dejarás de intentarlo, te rendirás y buscarás a esa otra persona que acabarás encontrando; pero te aseguro que no pasarás una sola noche sin necesitar otro abrazo suyo, o tan siquiera discutir una vez más. Todos saben de qué estoy hablando, porqué mientras estabas leyendo esto, se te ha venido su nombre a la cabeza, no librarás de él o de ella, dejarás de sufrir, conseguirás encontrar la paz, pero te aseguro que no pasará un día en que desees que estuviera aquí para perturbarlo: porque, a veces, se desprende más energía discutiendo con alguien a quien realmente amas que haciendo el amor con alguien a quien solo aprecias.